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El cambio de estación trae consigo un aumento en el uso de sistemas de calefacción, refrigeración y riego. Para responder a esta demanda, Loxone presenta una solución de automatización que centraliza la gestión energética en viviendas y edificios, optimizando consumos, reduciendo costes y ofreciendo monitorización en tiempo real.
Con la llegada del otoño y el uso combinado de calefacción, refrigeración y riego, se intensifica la necesidad de gestionar los consumos de manera eficiente. En este contexto, Loxone plantea una solución integral de automatización energética aplicable tanto a viviendas como a edificios terciarios. El sistema permite optimizar el uso de electricidad y agua, además de ofrecer supervisión en tiempo real mediante gráficos y alertas ante posibles anomalías.
La plataforma permite coordinar en un único sistema los principales elementos vinculados al consumo energético: climatización, protección solar, riego, energía fotovoltaica y carga de vehículos eléctricos. De este modo, los usuarios acceden a una visión completa del comportamiento energético de su edificio, identificando ineficiencias y optimizando recursos sin necesidad de controles manuales complejos.
Un ejemplo es la Wallbox de Loxone, que regula automáticamente la carga del vehículo eléctrico, hasta 22 kW, adaptándose a los excedentes solares o a las tarifas más económicas. Esta función evita sobrecargas y puede gestionarse desde la misma aplicación.
El sistema integra un limitador de cargas que ayuda a contratar una potencia eléctrica más ajustada sin afectar al confort. Si se alcanza el límite contratado, regula de forma automática los dispositivos menos prioritarios y los restablece en cuanto disminuye el consumo, evitando penalizaciones por picos de energía.
En edificios con instalaciones fotovoltaicas, el sistema redirige de manera inteligente la energía sobrante hacia dispositivos como la calefacción o la carga del coche eléctrico, según las prioridades establecidas. Todo el proceso se ajusta de forma dinámica, sin intervención manual y sin depender de la conexión a internet.
La aplicación de Loxone facilita la interpretación de los flujos energéticos: generación, consumo, almacenamiento, grado de autosuficiencia y emisiones de CO₂ evitadas. Además, ofrece estadísticas históricas que permiten detectar tendencias y anticipar posibles anomalías.
Las notificaciones push —disponibles en iOS, Android y smartwatch— informan de manera inmediata sobre consumos inusuales o cambios de temperatura, asegurando un control constante incluso en ausencia del usuario.
Al integrar en una sola plataforma la generación y el consumo energético, la propuesta de Loxone permite dimensionar con mayor precisión instalaciones como la fotovoltaica. Esta optimización contribuye a reducir costes operativos y acelerar el retorno de la inversión.
Más información en Loxone Eficiencia Energética.
