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Durante el encuentro celebrado en Cartagena, se presentaron tecnologías orientadas a la eficiencia energética, la electrificación y el uso de combustibles alternativos.
El pasado 22 de mayo, se celebró en Cartagena una nueva edición de Iberquimia, uno de los foros técnicos más relevantes para el sector químico a nivel nacional. El evento reunió a representantes de empresas, asociaciones y expertos para abordar los principales desafíos de la industria, con especial atención a la eficiencia energética, la seguridad industrial, el mantenimiento predictivo y la gestión de activos.
En este contexto, Bosch Industrial, presentó distintas soluciones tecnológicas orientadas a la descarbonización de los procesos térmicos industriales, un aspecto cada vez más prioritario en los planes de sostenibilidad del sector.
Durante su intervención, José Ramón Gaitero Souto, ingeniero especializado en calderas industriales, expuso las últimas tecnologías aplicadas a la reducción de emisiones en procesos térmicos, tanto en proyectos de renovación como en nuevas instalaciones. Su ponencia, titulada “Soluciones para la descarbonización en los procesos térmicos industriales”, abordó cómo la modernización de salas técnicas puede contribuir a una transición energética más eficiente.
Entre las tecnologías analizadas, se destacaron las iniciativas en electrificación industrial y el uso de combustibles alternativos como el hidrógeno verde, así como soluciones híbridas que combinan diversas fuentes energéticas. Estas estrategias permiten avanzar hacia modelos productivos más sostenibles, compatibles con los objetivos de reducción de emisiones y eficiencia operativa.
Según explicó Gaitero, la innovación tecnológica y la inversión en I+D son elementos clave para facilitar la transformación energética del sector. “Creemos en el hidrógeno verde como una fuente con alto potencial de descarbonización, y apostamos por soluciones que integren distintas tecnologías para optimizar el uso de los recursos”, afirmó durante su intervención.
La jornada puso de relieve el papel de la industria química como uno de los sectores estratégicos en el proceso de transición energética, así como la necesidad de implementar soluciones técnicas viables que permitan reducir el impacto ambiental sin comprometer la competitividad.
