Geberit optimiza tiempos de instalación con su nueva Solución Completa para inodoros suspendidos

Geberit, especialista en porcelana sanitaria y tecnología para el baño, ha desarrollado un sistema que permite instalar inodoros suspendidos con cisterna empotrada un 40% más rápido que las soluciones convencionales. La nueva Solución Completa Geberit integra mejoras tecnológicas orientadas a agilizar el trabajo de instaladores y reformistas en obra, reduciendo la necesidad de herramientas y simplificando cada fase del montaje.

Uno de los principales avances se encuentra en el bastidor con cisterna empotrada Duofix, que incorpora una serie de elementos diseñados para facilitar la instalación en distintos tipos de entornos constructivos:

• Fijación lateral extraíble en los extremos superiores del bastidor, que permite trabajar en paredes ligeras y en esquinas con acceso limitado.
• Opciones adicionales de anclaje a la pared, útiles en situaciones con obstáculos como ventanas, cableado o instalaciones previas.
• Nueva base de patas, que mejora la fijación de la cisterna al suelo.
• Marcas de referencia en el bastidor, que facilitan la medición precisa del eje de las varillas roscadas y del centro del codo de evacuación.
• Codo de descarga ajustable, que se desliza para evitar tensiones en la tubería durante la instalación.
• Espárragos con punta hexalobular Torx®, que permiten un ajuste adicional mediante destornillador.

Además, la Solución Completa Geberit incorpora el sistema de fijación rápida EFF3 (Easy Fast Fixing), incluido de serie en los inodoros suspendidos de la marca. Este sistema se basa en una barra de acero premontada en la parte posterior del inodoro, sobre la cual se fijan dos engranajes angulares que permiten instalar el conjunto deslizando el inodoro sobre las varillas roscadas del bastidor. La fijación del asiento se realiza desde la parte superior, a través de dos orificios accesibles.

Con estas mejoras, Geberit propone una solución integral que reduce significativamente los tiempos de montaje y minimiza la complejidad técnica, lo que representa una ventaja operativa tanto para instaladores como para responsables de obra.