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Castilla y León avanza en la implantación de redes de calor sostenibles basadas en biomasa forestal como alternativa eficiente para calefacción, agua caliente y refrigeración en entornos urbanos e industriales.
Impulsar redes de calor sostenibles basadas en biomasa forestal es una de las principales propuestas de los ingenieros industriales para avanzar en la descarbonización del sector térmico en Castilla y León. Así lo manifestó Carlos Blanco, ingeniero industrial y responsable de Obras y Proyectos del Departamento de Eficiencia y Energías Renovables de la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente, Somacyl, durante una jornada técnica celebrada en Valladolid.
El objetivo, explicó Blanco, es extender este modelo energético al mayor número de municipios de la comunidad, alineándose con las directrices de la Unión Europea. Estas redes, además de reducir el consumo eléctrico y las emisiones de CO₂, suponen una oportunidad para el desarrollo de proyectos técnicos que generan empleo y reducen costes operativos.
La jornada fue organizada por los colegios de ingenieros industriales de León y Valladolid, en colaboración con Somacyl, y reunió a más de 30 profesionales. Durante la sesión, los asistentes visitaron la central de calor Valladolid Oeste y la subestación de intercambio térmico del Centro Cultural Miguel Delibes, con explicaciones técnicas a cargo de Carlos Blanco y José Ignacio Cambero, CEO de Cofrica y colegiado del Colegio de León.
Cambero subrayó el papel estratégico de la biomasa en la transición energética, al tratarse de un sistema eficaz de descarbonización en todo tipo de entornos térmicos. También destacó su contribución a la economía circular y al dinamismo de sectores vinculados a la gestión de masas forestales, lo que refuerza su impacto positivo a nivel local.
Actualmente, Somacyl gestiona 17 redes de calor alimentadas con astilla forestal. Estas instalaciones, que han supuesto una inversión de 47 millones de euros, disponen de 45 km de redes térmicas y una potencia renovable instalada de 69.000 kW. El suministro anual alcanza los 144 millones de kWh, abasteciendo a 118 edificios públicos, 3.000 viviendas y nueve industrias.
Entre las redes más destacadas se encuentran la de la Universidad de Valladolid, el Polígono de Villalonquéjar (Burgos), Huerta del Rey (Valladolid) y Ponferrada.
Somacyl prevé ampliar significativamente su infraestructura térmica renovable con 12 nuevas redes de calor en fase de desarrollo, que implicarán una inversión adicional de 174 millones de euros. El objetivo a 2030 es alcanzar una potencia instalada de 239.000 kW, una red de distribución de 180 km y un suministro anual de 495 millones de kWh para 350 edificios públicos, 32.000 viviendas y nueve industrias.
Las obras generarán unos 500 empleos directos en fase de construcción, así como 160 puestos de trabajo permanentes relacionados con el mantenimiento y la logística de la biomasa.
Entre los nuevos proyectos destacan las redes de León (55,7 millones de euros), Salamanca (35), Valladolid Oeste (35) y Segovia (22,5). También se contempla la construcción de redes en Villablino, Bembibre, Aguilar de Campoo y Ciudad Rodrigo, además de la modernización de instalaciones en Cuéllar y Las Navas del Marqués, y la ampliación de las redes existentes en Ponferrada y Huerta del Rey.
Estas actuaciones están cofinanciadas con fondos europeos Feder 2021-2027 y el Fondo de Transición Justa.
