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Como sucede con otros segmentos de mercado parece que lo peor ha quedado atrás. La mayoría de fabricantes se manifiesta en esa línea y los últimos datos de AFEC, a la que pertenecen varios de los participantes en este informe, también hablan de crecimiento. Según la patronal de fabricantes de climatización, el mercado movió 114,25 millones de euros en 2014, con un aumento del 3,86% sobre las cifras del año anterior.
El mercado movió, según AFEC, 114,25 millones de euros en 2014
Las perspectivas para 2015 también son favorables, según la opinión de los principales actores. El crecimiento está siendo de doble dígito, lo que se explica por varios fenómenos: la recuperación de la confianza de los consumidores, la reactivación del préstamo por parte de la banca y un tercer fenómeno, el precio al alza de la energía, que hace más atractiva la inversión en control y regulación.
Además, el recorrido de la tecnología hasta hoy y su éxito probado anima más al cambio y a invertir en soluciones que favorezcan el ahorro de energía y la disminución de los costes. Un fabricante también apunta como factor dinamizador a la democratización de la domótica y la tecnología de control, cada vez más presentes en hogares y edificios.
En los últimos años ha aumentado el número de usuarios que demandan soluciones tecnológicas, que puedan controlarse a distancia y manejen distintas funcionalidades de los sistemas de climatización y de otros aparatos e instalaciones del hogar (iluminación, persianas, toldos, etc...) para garantizar el máximo confort.
La integración domótica de la edificación o de la vivienda ha devenido en una opción, a veces incluso primordial, a la hora de tomar una decisión de compra por parte del usuario.
Por otro lado, el control de los sistemas de climatización es clave para conseguir ahorros, gestionar de un modo adecuado los horarios de conexión y desconexión de equipos, realizar una gestión de aire de renovación inteligente además de adaptar el caudal de aire o agua de la instalación y, por último, dimensionar los equipos para la potencia real del edificio, lo que puede suponer importantes ahorros.
