Aislamiento: La eficiencia energética, el factor más destacado de un mercado en crecimiento

En el caso de la eficiencia energética, la necesidad de energía para la obtención de calefacción y agua caliente resulta menor si las tuberías están bien aisladas, ya que reducen la pérdida de calor. Al mismo tiempo, la reducción de la pérdida de calor evita que las tuberías calienten el edificio cuando no sea necesario, disminuyendo así la necesidad de sistemas de refrigeración.

El aislamiento de tuberías proporciona la temperatura ideal en interiores durante todo el año, puesto que garantiza que el calor que se genera se distribuya por las zonas deseadas. Asimismo, facilita un mejor uso del agua para los ocupantes del edificio.

Lo cierto es que la necesidad de aislamiento de alta calidad ha aumentado en los últimos años. Hay dos razones que justifican este crecimiento. Por un lado, los usuarios se están dando cuenta de los beneficios en términos de ahorro de energía, también otros factores juegan a su favor, como la reducción de ruido que se obtiene con un adecuado aislamiento. Por otro lado, las regulaciones han establecido objetivos ambiciosos en el caso de aumentar la eficiencia del edificio.

Además, las instalaciones de calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria deben conseguir un uso racional de la energía, y por otro lado, garantizar a los edificios y usuarios de los mismos protección y seguridad.

En los edificios industriales y de pública concurrencia, como es el caso de centros comerciales, hospitales, colegios, universidades u oficinas, son espacios con una gran afluencia de personas, y guardan en su interior, bienes materiales con gran valor económico. Por ello se debe prestar gran atención a la protección pasiva.

Además, la publicación de la nueva actualización del RITE hace que los fabricantes deban adaptarse a estos nuevos requisitos.

El mercado está cada vez más especializado y las empresas dedicadas a la instalación de aislamiento demandan soluciones muy técnicas.