Termos eléctricos: El mercado se centra en la reposición y apuesta por la eficiencia energética

Lo cierto es que el termo eléctrico es un producto que no deja de reinventarse en los últimos años, consecuencia de los requisitos reglamentarios y la mejora del producto en términos de eficiencia energética.

La innovación se ha convertido en un requisito indispensable para los fabricantes que operan en este mercado. Las exigencias normativas y las nuevas tendencias tecnológicas han provocado la producción de equipos de altas prestaciones. De este modo, se han convertido en estándar aspectos como la conectividad Wifi o los controles inteligentes que aprenden y anticipan los hábitos de consumo del usuario.

Además, estos equipos ofrecen también integración con energías renovables, caso de la aerotermia, lo que ha abierto la puerta al desarrollo de soluciones innovadoras. En este sentido, ya existen soluciones híbridas que unen lo mejor de la energía eléctrica con la aerotermia.

Un fabricante que nos ha hecho llegar su opinión ofrece el dato de un crecimiento del mercado en torno al 2% en 2019. La opinión de otra marca apunta al crecimiento en el último ejercicio del sector de termos eléctricos debido a la bajada de unidades de calentadores instantáneos a gas.

Hablamos, en cualquier caso, de un mercado consolidado, de venta constante, especialmente en reposición, pero también en nueva construcción, con ciertas zonas geográficas con especial demanda de un producto que es sencillo a la hora de instalar y de fácil funcionamiento. Una solución práctica para asumir las necesidades de confort de cualquier hogar.

Una tendencia mayoritaria es la de la conectividad, con un enfoque cada vez mayor hacia la incorporación de nuevas opciones de control en los productos. Funciones de memorización de hábitos de consumo que permiten programar los modos de uso y hacer que el consumo sea cada vez más eficiente.